Hola amigos y amigas en cada uno de los remotos rincones de nuestro planeta tierra.
Vengo medio atrasado con el blog, asi que voy a contarles del dia que fuimos al Saigon Waterpark, hace ya como dos semanas.
La idea fue de Andres y Daniela, de ir para alla. Recien estaba llegado Federico, el nuevo argentino en Saigon, que viene a reemplazar a Andres en su puesto en SADESA, ya que ellos se vuelven por un tiempo a Argentina y luego se van a USA a hacer un master.
Asi es que nos encontramos tipo 11 en la puerta del hotel Caravelle, y de ahi tomamos un taxi hasta Thu Duc, distrito de Saigon donde esta el parque, mas o menos a unos 30/45 minutos de viaje desde el centro.
Como anecdota del dia: Ibamos en el taxi, todavia no habiendo salido del centro, y el chofer, saca un par de cassettes, empieza a buscar, y finalmente pone uno. "Vamos a la playa... oh oh oh"!!! Te imaginas las caras nuestras! Claro... vamos a la playa, y en espaniol! Nos quedo la duda si fue pura casualidad o realmente el tipo sabia que hablabamos espaniol y por eso lo puso.
Llegamos y la impresion la verdad que fue mas que buena. Yo me esperaba encontrar un par de fuentes, un tobogancito y una pelopincho, pero no! Es un parque de verdad! Parque... parque... En realidad cuando digo parque me refiero a una extension de terreno para entretenimiento, no se imaginen mucho verde. Pero la verdad que esta bastante bien. Un ingreso al mejor estilo Disney, vestuarios y banios, lockers para dejar los bolsos...
Conseguimos unas reposeras de bambu, y nos acomodamos a la sombra de un arbol, al costado de la pileta mayor. De ahi al vestuario a ponernos la indumentaria adecuada y de ahi al primero de las atracciones.
Fuimos a este primero, porque parecia el menos excitante. Un tobogan (que aparece en las fotos que puse algunas semanas atras), de 6 carriles, en el que uno se desliza con el agua, sobre unas alfombritas de goma que hacen que la velocidad sea importante, y en cada uno de los 3 o 4 saltos, se vaya desprendiendo progresivamente de la superficie del tobogan y los testiculos se vayan ubicando a cada lado del esofago.
Nos tiramos unas cuantas veces de este, haciendo carreras varias, y luego al que estaba al lado. Dos tubos, cerrados que se van trensando el uno con el otro hasta llegar al suelo. Si el anterior habia provocado cierto "cagazo" luego de este ultimo, la adrenalina habia alcanzado niveles importantes.
Luego de alli, fuimos a almorzar. Hay puestitos de cuantos tipos de comida vietnamita se te ocurra, no muy apetecible por cierto ninguna de ellas. Asi que terminamos comiendo unas hamburguesas en un puesto, al mejor estilo Mc.Donals.
Luego del almuerzo, y para esperar la digestion con Louise fuimos a dar una vuelta, en una especie de rio o canal que recorre todo el parque, y en el que uno se recuesta en unos salvavidas o gomones y va desplazandose empujado por la corriente alrededor del resto de los juegos.
Fuimos un rato a la piscina principal, enorme y de forma de casi triangular, con la particularidad de que tiene olas creadas artificialmente.
Luego fuimos a los toboganes. Esta atraccion se divide en tres. Sobre un lado tenes tres toboganes, en los que te tiras acostado y de a uno a la vez (eso es lo que dice el cartel en vietnamita, pero nosotros nos llegamos a tirar 5 juntos uno a tras de otro, de cabeza y boca a bajo). Luego otros 2 toboganes que te tiras en botes inflables, de a uno, de a dos o de a tres. Uno de los toboganes es cerrado, y totalmente oscuro, asi que durante todo el recorrido no ves absolutamente nada, lo cual le suma mas adrenalina aun. Lo mejor es que llegando al final, digo, cuando empezas a ver la luz al final del tunel, de golpe el tobogan se hace muy empinado y "volas" literalmente cayendo sobre la piscina.
Los ultimos dos toboganes, de color negro, son los mas rapidos. Son cerrados tambien y mas angostos. Uno de ellos es bastante corto, y con curvas poco pronunciadas pero al final tiene una caida que podriamos llamar "caida casi libre" en la que los testiculos que tenias a cada lado del esofago vuelan por el aire.
Asi fue que estuvimos toda la tarde subiendo y tirandonos de cada uno de los toboganes. Lo mas divertido fue las "luchas" y estrategias para enganiar al tipo que cuida arriba y asi tirarnos todos juntos, o de cabeza! Nos divertimos mucho.
No puedo explicar el dolor de piernas en la noche y al dia siguiente, luego de subir la escalera de 3 o 4 pisos unas 20 veces!
Pero valio la pena...
Ahora estamos planeando volver algun finde de estos.
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